En las últimas semanas, dos casos recientes han puesto en alerta a los viajeros costarricenses. Una pareja tica en Río de Janeiro vivió una “pesadilla” cuando Mauricio fue internado por pancreatitis aguda poco después de llegar a Brasil. Los tres días en un hospital privado le costaron unos USD 18.000. Sin seguro de viaje, la pareja tuvo que trasladarse al hospital público y depender casi exclusivamente de ayuda consular. De forma similar, la familia del joven poeta Ignacio Arú solicitó ayuda para repatriar su cuerpo desde Ciudad de México después de que falleció mientras participaba en un evento cultural. En ambos casos no solo fue la falta de recursos, sino la ausencia de una póliza de viaje adecuada lo que complicó gravemente la situación. Estos ejemplos ilustran hasta qué punto un imprevisto sanitario o fatal puede disparar gastos que la mayoría de las personas no planifica asumir.
¿Por qué es esencial un seguro de viaje?
Contrario a lo que muchos suponen, viajar sin seguro es la norma entre los ticos: un estudio reveló que el 84 % de los costarricenses sale del país sin cobertura internacional. Esto ocurre a pesar de que un accidente o enfermedad en el extranjero puede representar “un inconveniente muy grande para la economía”, dado que los costos médicos suelen ser altísimos sin cobertura. Las aseguradoras destacan que por poco dinero se puede viajar con tranquilidad si se adquiere un seguro adecuado. Un accidente leve, una fractura o una enfermedad común pueden requerir atención urgente; con seguro, “no tenemos deducible” y los gastos se cubren hasta el tope contratado. Además, el seguro de viaje suele incluir otros beneficios esenciales (pérdida de equipaje, retrasos, cancelaciones) que permiten resolver situaciones sin tener que desembolsar dinero adicional.
- Cobertura médica de emergencia: atiende accidentes y enfermedades súbitas en el exterior. Incluye hospitalización, consultas y medicamentos urgentes.
- Evacuación y repatriación: transporte sanitario o aéreo de emergencia al país de origen o a un centro médico; repatriación de restos en caso de fallecimiento.
- Asistencia dental de urgencia: cubre emergencias odontológicas imprevistas.
- Cancelación o interrupción de viaje: reembolso de gastos de viaje no gozados si el viaje se cancela por enfermedad grave u otros motivos previstos.
- Pérdida, daño o retraso de equipaje/documentos: compensaciones para comprar lo esencial si se pierde el equipaje o los documentos en el trayecto.
- Asistencia legal y gastos de viaje: apoyo para trámites consulares o legales en caso de accidente de tránsito, incluidas fianzas y defensa, así como boletos de regreso por situaciones graves en el hogar.
Cada proveedor puede tener coberturas adicionales. Por ejemplo, algunos planes reembolsan hasta $10 diarios por cuidado de mascotas o cubren deportes de aventura. En definitiva, estas pólizas buscan evitar que un imprevisto se convierta en una crisis económica mayor. Como resumen, el INS describe así las coberturas típicas: “Accidentes, gastos médicos y hospitalización; cancelación o acortamiento de viaje; retraso de vuelo; pérdida de pasaporte o equipaje”.
Además del seguro de viaje, es conveniente revisar la cobertura de seguros de vida o funerarios. Muchas pólizas de viaje incluyen una “cobertura de vida” que aplica en caso de muerte o incapacidad del asegurado. Esto implica un adelanto de gastos funerarios o un pago a los beneficiarios. Por ejemplo, el seguro de viaje de BAC Credomatic especifica que su cobertura de vida ampara “muerte, incapacidad, pérdida de extremidades o anticipo de gasto funerario”. En la práctica, esto significa que el monto asegurado ayuda a pagar la repatriación del cuerpo y los costos funerarios, lo que puede aliviar enormemente a la familia en una tragedia. Sin estas coberturas, la familia de Ignacio Arú tuvo que recaudar fondos a través de SINPE Móvil para traerlo de regreso, un gesto doloroso que un seguro de viaje podría haber resuelto directamente.
Opciones de seguro en Costa Rica: precios y beneficios
En Costa Rica existen varios proveedores de seguros de viaje. A continuación, se mencionan algunos ejemplos representativos con sus coberturas y costos aproximados:
- Banco Nacional – Sagicor (Seguro Viajero Autoexpedible): planes diseñados para viajes hasta 90 días. Ofrece coberturas médicas desde USD 10.000 hasta USD 100.000 según el plan (Plata, Oro, Platino, Diamante). Incluye asistencia médica, repatriación, cobertura dental básica, hospedaje por hospitalización, equipaje, traslado de familiares, etc. En la página de Sagicor se detalla que para viajes cortos (1 a 5 días, personas de 2 a 74 años) las primas oscilan entre $50,80 (plan Blue) y $122,60 (plan Black), con un costo adicional de aproximadamente $10–25 por cada día extra. Estos precios se ajustan según edad y duración del viaje. Así, un viaje breve por EE. UU. o Europa cuesta apenas unas decenas de dólares, dando acceso a coberturas significativas.
- BAC Credomatic – ASSA (Seguro de Viaje): seguro turístico que resalta la facilidad y ausencia de deducibles. Según BAC, “por poco dinero puede viajar con tranquilidad adquiriendo un seguro de viaje”. Sus planes cubren gastos médicos y hospitalarios, traslado de emergencia, pérdida de documentos, equipaje y repatriación. En la web de BAC se destaca que los gastos de emergencia “serán cubiertos por el seguro… sin deducibles hasta el tope de la cobertura”. Además, las coberturas de “vida” de este producto aplican en caso de fallecimiento o incapacidad, brindando apoyo económico (por ejemplo, anticipo de gastos funerarios).
- Grupo INS (Seguro Viajero): el Instituto Nacional de Seguros ofrece un plan para viajeros que cubre hasta 180 días. Su póliza típica incluye “accidentes; gastos médicos y hospitalización; renta diaria por hospitalización; cancelación o acortamiento de viaje; retraso de vuelo; pérdida de pasaporte; pérdida de equipaje”. Es una opción amplia para viajes largos o de trabajo en el exterior. El INS permite cotizar y pagar en línea, y a pesar de ser una entidad estatal suele tener precios competitivos para los corredores de viajes y empresas turísticas.
- Pan-American Life – Terrawind (Seguro Autoexpedible de Viaje): recientemente lanzado, es un producto 100 % en línea enfocado a cubrir las brechas actuales. Combina la experiencia de Pan-American Life (aseguradora de vida local) con la plataforma digital de Terrawind. Ofrece asistencia médica y legal en el extranjero, emergencia odontológica, cobertura de equipaje, cancelación de vuelos y repatriación de fallecidos con acompañamiento a la familia. Admite contratación por viaje específico, por día (paquetes empresariales) o anual. Para grupos familiares, aplica un 50 % de descuento de la segunda a la quinta persona. Aunque los precios dependen del destino y la duración, se promociona como un seguro ágil que cierra la brecha del alto porcentaje de viajeros sin protección.
- Otras opciones locales e internacionales: ARAG, Mapfre, Blue Cross, Assist Card y otras compañías también ofrecen seguros de viaje para ticos. Muchas operan en alianza con bancos o agencias de viajes y permiten escoger coberturas según el destino y la duración. Es aconsejable comparar límites de gastos médicos (al menos USD 50.000–100.000 recomendados), apoyo en emergencia y repatriación. En general, los costos de un seguro de viaje digno representan un pequeño porcentaje del total del viaje (por ejemplo, unos $50–100 para un viaje de una semana), pero pueden ahorrar cientos de miles de dólares en un imprevisto.
Adquirir un seguro médico de viaje (y revisar la cobertura de vida asociada) es una inversión mínima frente a las posibles consecuencias de una emergencia. Proporciona atención rápida, reduce gastos drásticamente y ofrece asistencia logística y legal en momentos críticos. Como advierten las aseguradoras: viajar con un seguro brinda “asistencia médica las 24 horas” y paga “toda la prestación, sin deducibles”. Ante situaciones como las de Río de Janeiro o México, este respaldo puede hacer la diferencia entre una pesadilla y un viaje controlable.
